Fundación Saldarriaga Concha apoya a El Carmen de Viboral en su compromiso con la inclusión
28 diciembre, 2022

Inclusión

La cuna de la cerámica artesanal, como se le conoce al municipio antioqueño El Carmen de Viboral, le está dando un giro a la atención de la población con discapacidad. Durante varios años el municipio ha realizado acciones para las personas con discapacidad enfocadas, especialmente, en el campo ocupacional y en el desarrollo de habilidades artísticas, lo cual no cumplía con todas las expectativas de esta población.

Por esto, la actual administración decidió dar un enfoque diferente a la atención y fortalecer los procesos de inclusión de las personas con discapacidad, que en este momento son 1.548 personas. Es decir, aproximadamente 3 % de la población, si se tiene en cuenta que el municipio tiene 49.642 habitantes.

La población con discapacidad ha manifestado que desea acceder a un empleo formal, fortalecer sus emprendimientos y formarse académicamente. Para llevar a cabo esta tarea, el municipio contactó a la Fundación Saldarriaga Concha con quien estableció una alianza. Hasta el momento, la misión de la fundación se ha centrado en el acompañamiento del equipo de la Unidad de Atención Integral del municipio (UAI) en tres líneas. Estas son: educación inclusiva, resiliencia y salud mental e inclusión laboral. En 2022 se adelantó el trabajo en las tres líneas.

Encuentros mensuales

“Durante todo el año se hicieron encuentros mensuales virtuales y algunos presenciales. En los encuentros enseñamos a los psicólogos, orientadores escolares y profesores que hacen parte de la UAI el modelo de resiliencia que tiene la fundación, que se llama: Conmigo, Contigo y con Todo. El objetivo es que ellos tengan estrategias para poder llevar a las instituciones educativas en donde trabajan y que en su mayoría atienden a personas con discapacidad”, dice Camila Castellanos, coordinadora de programas de la fundación, al referirse a la línea de resiliencia y salud mental.

Algo similar ocurrió con la línea de educación inclusiva. La fundación, mediante encuentros mensuales, hizo la transferencia de su modelo de educación inclusiva a los docentes de la UAI. Su objetivo es que apropiaran estrategias pedagógicas, de normativa y de cultura en relación a la inclusión. También se trataron temas como el Plan Individual de Ajustes Razonables (PIAR), el Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA) y otros según las temáticas propuestas por la fundación y las solicitadas por la alcaldía.

Dora Emilse Zuluaga Soto, licenciada en Educación Especial de la Universidad de Antioquia y docente de apoyo en la Institución Educativa Jorge Eliécer Gaitán del municipio El Carmen de Viboral, recibió estos talleres y capacitaciones. Asegura que fueron muy positivos porque les permitieron a los docentes cualificarse como profesionales en cada una de sus áreas para luego aportar de manera significativa en las diferentes instituciones educativas. Además, contribuyeron a su formación personal.

Entre los temas que se trataron, la docente destaca valoraciones pedagógicas, talentos excepcionales y discapacidad intelectual. “También, recibimos unos talleres llamados: Conmigo, Contigo y Con Todo, que pretendían desarrollar habilidades sociales y emocionales. Estas habilidades para aplicarlas en cada una de nosotras y luego en cada una de las instituciones educativas por medio de estrategias para el trabajo con estudiantes, con docentes o con padres de familia”, afirma.

Actualización de la política de discapacidad municipal

La Fundación Saldarriaga Concha está haciendo otro acompañamiento en el municipio. Se trata del acompañamiento para la actualización de su política pública de discapacidad, que tiene dos componentes: el diseño de la propuesta y la implementación.

Este proceso se espera finalizar el próximo año. Durante 2022 se trabajo en:

    • Conformar el Comité de Discapacidad
    • Se avanzó en el conocimiento del contexto y el alcance de la política pública
    • Se identificaron los elementos claves para la formulación de la política
    • Se definió una metodología participativa y se trabajó en el desarrollo de los procesos participativos de construcción de la política.

María Jimena Osorio Salazar, coordinadora de la UAI, dice que el acompañamiento de la fundación al equipo de la Unidad y a la actualización de la política de discapacidad ha sido muy grande. Ha permitido que el municipio tenga un equipo cualificado, formado y actualizado en cuanto a las políticas y los modelos de inclusión.

“Nos ha permitido orientar nuestras actividades y estrategias de acompañamiento al interior de las instituciones educativas y a nivel municipal. Con esto hay mayor impacto en la comunidad porque hemos podido implementar acciones que están alineadas a la política nacional y a las políticas actuales, haciendo que los procesos de inclusión a nivel municipal tengan un gran impacto convirtiéndonos en un referente para otros municipios del oriente antioqueño”, concluye Osorio.