El bienestar se refiere a la satisfacción de la vida. En este sentido, las experiencias adquiridas a lo largo de la vida, los recursos socioeconómicos, las oportunidades de salud, la participación y todo aquello que mejore la calidad de vida de las personas a medida que envejecen brindan bienestar.
“La participación social de las personas mayores es un derecho humano que responde a la necesidad de observar y considerar la vejez como una etapa que no representa declive o deterioro, sino que demanda la promoción de la participación para concretar el envejecimiento activo”, dice la Misión Colombia Envejece-Una Investigación Viva. Ver especial Misión Colombia Envejece: Una Investigación Viva.
El envejecimiento activo, según la investigación, implica mantener la autonomía y capacidad de realizar actividades físicas, de ocio y aprendizaje, así como fomentar la participación activa de las personas mayores en la vida socioeconómica y cultural. En ese sentido, se les debe garantizar su participación en la formulación de políticas públicas y dándoles un rol consciente en escenarios de incidencia social.
Vivir bien está determinado por diferentes elementos, pero, dice la investigación, es la satisfacción auto percibida que cada persona tiene de estas dimensiones, la que determina la satisfacción con la vida.
Bienestar material
“Una de las dimensiones más importantes dentro de la búsqueda de un mayor bienestar en la vejez es la garantía de un nivel básico de seguridad económica para las personas mayores. La estabilidad económica está fuertemente relacionada con otros aspectos del bienestar en la vejez analizados en la presente Misión, como es el caso del acceso a servicios de salud de calidad, la posibilidad de pagar servicios de cuidado, una mayor inclusión y participación social y un mejor estado de salud mental, entre otros”, dice uno de los grupos focales de la investigación.
En relación a la satisfacción financiera, la Encuesta de Valores en Crisis (VEC) muestra que la población menor de 60 años se siente más insatisfecha con su situación financiera que personas de más de 60 años (este porcentaje incluso duplica la insatisfacción en los mayores).
El segundo resultado relevante se presenta en la Encuesta Mundial de Valores (EMV) en donde la población mayor de 60 años se sentía completamente satisfecha con su situación financiera en más del doble que lo que se sienten satisfechos para VEC (32,5% vs. 13,6%).
Finalmente, 18 de cada 100 personas menores de 60 años expresan que se sienten totalmente insatisfechas con su situación laboral, mientras que 35 de cada 100 personas mayores de 60 años expresan lo mismo (Encuesta de Pulso Social).