Las personas con discapacidad pueden desarrollarse con éxito en los diferentes ámbitos y dimensiones de la vida, dependiendo de las oportunidades y facilitadores que se les brinde. Al contrario, las barreras actitudinales, físicas y comunicativas pueden limitar significativamente la participación plena y efectiva de estas personas en la sociedad. En parte, los mitos han ayudado a perpetuar las barreras.
Aprovechamos el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, 3 de diciembre, para romper con algunos de esos mitos sobre la población con discapacidad, que se estima en Colombia es de más 2,65 millones de personas (5,6% de las personas de 5 años y más), según el DANE.
Este día fue declarado en 1992 por la Asamblea General de Naciones Unidas con el objetivo de “promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidades en todos los ámbitos de la sociedad y el desarrollo, así como concienciar sobre su situación en todos los aspectos de la vida política, social, económica y cultural”.
Las personas con discapacidad “son aquellas que presentan deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales a largo plazo que, al interactuar con el entorno, encuentran diversas barreras, que pueden impedir su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones con los demás ciudadanos”, según la Ley 1618 de 2013 (Congreso de la República).
Mitos desde la comparación y el miedo
Mito 1: La personas con discapacidad son enfermas
Las personas con discapacidad no tienen una enfermedad, ni necesitan ser “curadas” para ser parte de la sociedad []… sino que es el entorno el que debe estar abierto a todas las personas (Naciones Unidas 2014). En este sentido, la discapacidad hace alusión a la interacción entre las características de la persona con las barreras del entorno. Por ejemplo: una persona con discapacidad física puede no tener ninguna enfermedad, pero que, al no tener los apoyos o ajustes requeridos para su comunicación, movilidad, desplazamiento, aprendizaje y participación, aumenta la probabilidad de ser más dependiente y requiera cada vez más apoyos.
Mito 2: Uno no sabe que le puedan hacer a uno
Este mito surge desde el miedo y recae con frecuencia sobre las personas con alguna discapacidad mental – psicosocial. Según el documento de la Fundación Saldarriaga Concha, Estigma y discapacidad psicosocial en el marco de los resultados en salud mental del conflicto armado en Colombia, en un estudio realizado en Jamaica, 43% de los familiares de personas con alguna discapacidad mental respondieron sentir miedo de sus familiares. Miedos muchas veces infundados por la cultura y no por información veraz.
Mitos asociados a la educación
Mito 3: la educación inclusiva es exclusiva para personas con discapacidad
La educación inclusiva es para todos, no solo para las personas con discapacidad. La educación inclusiva es aquella que responde de manera pertinente a la diversidad de características e intereses de las niñas, niños, adolescentes, jóvenes y adultos en general.
Mito 4: las personas con discapacidad no pueden aprender debido a sus limitaciones y requieren aulas u oferta educativa especial
Antes las personas con discapacidad asistían a instituciones de educación especial, en donde no tenían la posibilidad de aprender y relacionarse con otras personas sin discapacidad, generando situaciones de segregación y exclusión social. En realidad, la escuela tiene la capacidad de trabajar con todas las personas desde sus diversidades, así como también tiene la capacidad de devolver dignidad a las personas con discapacidad, porque su función es garantizar el derecho a la educación, sin excepción.
Mito 5: las personas con discapacidad son todas iguales o aprenden igual
Esto es falso porque existen varios tipos de discapacidad y, así como todos los seres humanos, las personas con discapacidad son diferentes. Su desarrollo y aprendizaje depende de las oportunidades que se les brinden y del entorno en el cual se desarrollen. “Toda persona tienen en sí misma posibilidades que están a la espera de ser descubiertas”, afirmaba Helen Keller, escritora, oradora y activista política sordociega estadounidense.
Mito 6: Todas las personas con discapacidad son niños o niñas
Las personas con discapacidad, como cualquier otras persona, transitan por un curso de vida: son bebés, niños, adolescentes, jóvenes, adultos y personas mayores. No son niños eternos.
Mitos asociados a la seguridad económica
Mito 7: las personas con discapacidad no pueden trabajar
Sí lo pueden hacer e incluso pueden ser más productivas que una persona sin discapacidad en ciertos oficios. Por ejemplo, algunas personas con Trastorno del Espectro Autista, el cual hace parte de la discapacidad psicosocial, son más productivas a la hora de programar. La productividad de los trabajadores con discapacidad es equiparable a la de personas sin discapacidad.
Mito 8: Una persona con discapacidad no puede emprender o tener su propia empresa
Sí puede, requiere de oportunidades de formación y capacitación para hacerlo. La existencia de este mito hace que las personas con discapacidad tengan dificultades para acceder al ecosistema de emprendimiento como fuentes de financiación, mentorías o asesorías.
Mitos relacionados con tecnología
Mito 9: la accesibilidad es solo para personas con discapacidad
La accesibilidad no solo beneficia a las personas con discapacidades permanentes o temporales, sino que mejora la usabilidad para todos. Hay prácticas accesibles que utiliza la mayoría de la población, herramientas habituales como los comandos de voz y la conversión de voz a texto que surgieron para hacer accesibles los contenidos a las personas con discapacidad, pero que ahora se han adoptado de manera generalizada.
Mito 10: las personas con discapacidad no utilizan internet, ni tecnología
Las nuevas tecnologías han ayudado a que las personas con discapacidad tengan mayor autonomía y autodeterminación en los diferentes contextos y entornos de aprendizaje, participación y socialización.