‘Aprender para una paz duradera’. Ese es el lema que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) eligió este año para celebrar el Día Internacional de la Educación, que es el 24 de enero.
Un lema que surge por los conflictos que se están presentando en el mundo y por el aumento de la discriminación, el racismo, la xenofobia y la incitación al odio. Así mismo, el lema es una invitación a que el aprendizaje para la paz contribuya a dotar a los alumnos de conocimientos, valores, actitudes, competencias y comportamientos necesarios para convertirse en agentes de paz en sus comunidades.
“Sin una educación de calidad, inclusiva y equitativa para todos y de oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida, los países no lograrán alcanzar la igualdad de género ni romper el ciclo de pobreza que deja rezagados a millones de niños, jóvenes y adultos”, dice la Unesco.
Por esta razón, y en el marco de la celebración, entrevistamos a Deisy Paola Barreto Munévar, experta en educación inclusiva y con un gran conocimiento sobre cómo se lleva a la práctica en Colombia.
Ella es consultora en Educación y Formación de la Fundación Saldarriaga Concha, ha liderado y acompañado procesos de investigación relacionados con primera infancia y procesos de atención a estudiantes con discapacidad en el marco de la educación inclusiva. También ha desarrollado procesos de formación y acompañamiento técnico y administrativo a diferentes actores de la comunidad educativa en entidades públicas y privadas en varios territorios del país. Además, es coautora de libros publicados por el Ministerio de Educación Nacional y la Secretaría de Educación del Distrito relacionados con las trayectorias educativas de las personas con discapacidad.
¿Qué es educación inclusiva?
La educación inclusiva es un proceso sistémico y permanente que reconoce, apoya y acoge la diversidad de todas las personas para garantizar el derecho a la educación con calidad. Hacer mención de una educación que reconoce y valora la diversidad de todas las personas, se relaciona con hacer énfasis en un sistema educativo que identifica y elimina las barreras de tipo comunicativas, físicas o actitudinales que puedan generar situaciones de exclusión o discriminación, así como impedir el pleno desarrollo y participación de todos los estudiantes.
En este sentido, un sistema educativo inclusivo le apuesta a la generación de acciones y ajustes necesarios para promover las trayectorias educativas completas y de calidad de todas las personas, de acuerdo con el curso de vida, sus habilidades, capacidades y necesidades de apoyo. Con lo anterior, se resalta que la educación inclusiva no hace referencia a la participación de ciertos grupos poblacionales, sino a la promoción de la garantía del derecho a la educación con calidad de todas las personas, sin excepciones, en el marco de la diversidad.
En este orden, es una invitación a revisar cómo nos expresamos y a no usar términos como: “estudiantes de inclusión”, “estudiantes especiales”, “estudiantes con necesidades educativas especiales”, entre otros, para referirnos a los estudiantes con discapacidad.
¿Cómo es un día a día en el trabajo con educación inclusiva o qué experiencias nos puede contar de su trabajo en este tema?
Quienes le apostamos a una educación de calidad, es decir a una educación inclusiva que reconoce, respeta y valora la diversidad, el día a día siempre estará enmarcado por la innovación, la escucha y la lectura de sus propias realidades que llevan a estar en constante revisión y reflexión pedagógica con miras a promover aprendizajes a lo largo de la vida y a la participación de todos los estudiantes desde sus múltiples características. En este sentido, los diferentes actores del ecosistema educativo deben participar en procesos de actualización con apertura al cambio de manera permanente, a la construcción conjunta, a la validación de saberes y con la disposición al trabajo en equipo y a aprender y desaprender constantemente para poder acompañar los procesos de enseñanza y aprendizaje que se gestan en las aulas y fuera de ellas.
¿A qué normas, leyes o acuerdos internacionales está suscrito Colombia en cuanto a la educación inclusiva?
Colombia siempre ha estado en línea de dar cumplimiento a las orientaciones enmarcadas en el Movimiento de Educación para todos, liderado y promovido por la UNESCO desde 1990 en la Conferencia Mundial sobre Educación para Todos y el Marco de Acción para Satisfacer las Necesidades Básicas de Aprendizaje. En adelante, la UNESCO ha realizado informes de seguimiento al derecho a la Educación y, con ellos, la promoción de avances y ajustes en diferentes encuentros y conferencias de carácter mundial. Para el año 2019, la UNESCO desarrolló en la Ciudad de Cali el Foro Internacional sobre Inclusión y Equidad, espacio del cual surgieron unos compromisos con miras a garantizar el derecho a la educación de todas las personas y, por supuesto, a avanzar en el marco de la Agenda 2030 y el Objetivo de Desarrollo Sostenible Número 4 (ODS4), el cual propone “garantizar una educación inclusiva equitativa y de calidad” que pueda promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todas las personas. En este marco, Colombia continúa desarrollando acciones pertinentes para garantizar las trayectorias educativas completas y de calidad para todas las personas.
Para la garantía del derecho a la educación de las personas con discapacidad, Colombia cuenta con el Decreto 1421 de 2017, por el cual se reglamenta la atención educativa a la población con discapacidad en el marco de la educación inclusiva, expedido por el Ministerio de Educación Nacional. Este documento es, a su vez, una de las “respuestas normativas”, posterior al Decreto 366 de 2009, a los diferentes movimientos sociales, culturales, políticos y económicos que se han dado posterior a la publicación de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad en el 2006, la cual fue aprobada en Colombia a través de la Ley 1346 en el 2009.
¿Qué avances y proyectos hay en el país en educación inclusiva?
En Colombia se adelantan proyectos en pro de seguir garantizando el derecho a la educación de las personas con o sin discapacidad en el marco de la educación inclusiva liderados por entidades del Estado, principalmente por el Ministerio de Educación Nacional, las secretarías de Educación y los establecimientos educativos públicos y privados, así como por organizaciones de carácter privado u organizaciones de la sociedad civil interesadas en aportar al ejercicio del derecho a la educación.
En este orden, un gran avance que tiene el país en términos de orientaciones para promover la educación inclusiva, es contar con los Lineamientos de Política para la Inclusión y la Equidad. Este documento le brinda al país una herramienta de gestión institucional para que los actores de todo el sistema educativo se logren articular y generar acciones que faciliten y promuevan trayectorias educativas completas. Es decir, que generen un acceso oportuno al sistema educativo, una permanencia de calidad que permita transiciones adecuadas entre los diferentes niveles desde el preescolar hasta la educación posmedia, a través del diseño y ajuste de estrategias administrativas y pedagógicas pertinentes acordes con las características de la población y los territorios.
Otro recurso con el cual cuenta el país es la Colección Promover trayectorias educativas completas de niñas, niños y adolescentes con discapacidad, en el marco de la educación inclusiva y de calidad, la cual contiene guías y cartillas orientadoras para que las instituciones educativas, en el marco de su autonomía, puedan apropiarlos y orientar un proceso de educación inclusiva con calidad para todas las personas.
De igual forma, la estrategia Maestros por la inclusión, liderada por la Fundación Saldarriaga Concha, cuenta con un centro de recursos en la página web de la Fundación donde se encuentran diferentes documentos, infografías, videos y otros materiales que aportan a la construcción y revisión de los documentos institucionales y misionales de las entidades territoriales certificadas y de los establecimientos educativos, con miras a seguir promoviendo una educación de calidad para todas las personas. En esta misma plataforma, se presentan experiencias significativas de maestros y maestras del país que, en el marco de la estrategia Mi experiencia cuenta se han divulgado las acciones innovadoras que han permitido generar prácticas pedagógicas y administrativas inclusivas.
Es importante que las acciones que se desarrollen en los territorios sean enmarcadas en la construcción conjunta con los diferentes actores, partiendo del reconocimiento del saber pedagógico, técnico y social que tienen los maestros y maestras, los directivos, los funcionarios, las familias y los estudiantes. Esto permitirá que los avances sean más significativos dado que se brindan respuestas oportunas de acuerdo con las fortalezas y retos que presente cada entidad territorial.