La búsqueda de empleo para las personas con discapacidad se convierte en todo un desafío. Día a día se enfrentan a la discriminación y estigma en el sector productivo por temor o desconocimiento, en tanto hay empresas que les niegan oportunidades para vincularse y continuar con su tránsito al mundo laboral. Las estadísticas reflejan esta situación: entre abril y diciembre de 2021, solo el 21,9% de las personas con discapacidad en edad laboral estaba empleada, en comparación con el 63,6% de las personas sin discapacidad. Esta realidad es de interés y se convierte en un reto para la Fundación Saldarriaga Concha y sus diferentes aliados.
Recientemente, con apoyo del Global Opportunity Youth Network (GOYN), la Fundación ofreció un espacio dirigido a los operadores del Fondo Quiero ser Digital, con el objetivo de fortalecer sus habilidades en la formación e inclusión de personas con discapacidad en el sector digital.
GOYN es una estrategia global de diferentes actores que tiene el objetivo de generar y escalar oportunidades de formación, empleo y emprendimiento para jóvenes. Esta estrategia incluye el Fondo Quiero Ser Digital, una plataforma digital que tiene como finalidad formar y orientar a los Jóvenes con Potencial (que no estudian, ni trabajan o están en la informalidad) sobre carreras digitales y su oferta laboral. La Fundación Saldarriaga Concha es aliada de esta plataforma.
Los operadores de este programa son los encargados de llevar la formación académica y apoyar el proceso de inclusión laboral a diferentes poblaciones, en este caso a jóvenes con discapacidad. “Enmarcamos este espacio en la inclusión y equidad de manera que las convocatorias, las rutas de formación y la inclusión productiva de los operadores garanticen la participación de todas las personas, sin excepción, haciendo énfasis en aquellas más excluidas de este tipo de oportunidades de formación y vinculación laboral, como las personas con discapacidad”, explica Rossana Cuervo Botero, coordinadora de Educación y Formación de la Fundación Saldarriaga Concha.
Para lograrlo, el espacio estuvo divido en tres momentos: ‘La discapacidad hablada desde los actores’, ‘El paradigma de la Inclusión: Una forma diferente de crear cultura incluyente y accesible’ y el ‘Conversatorio dinamizado por jóvenes con discapacidad sobre formación para el trabajo en el sector digital’.
Fortalecimiento de capacidades
“Lo más destacado del conversatorio fue ver el potencial que tenemos las personas con discapacidad para trabajar en diferentes ámbitos, crear iniciativas y aportar a la sociedad. Así mismo, conocer que los entornos digitales también pueden adaptarse a las personas con discapacidad para sacar todo su potencial”, dice Mauricio Salazar Latorre, empresario, becario de la Fundación Saldarriaga Concha y participante del conversatorio.
La Fundación Siigo, operadora de esta plataforma, participó en este espacio. “A partir de esta experiencia con la Fundación Saldarriaga Concha comenzamos a revisar de manera más detallada las necesidades y los desafíos que tenemos como formadores de personas con discapacidad”, dice Carol Ariza, coordinadora de Proyectos de esta fundación.
De esa forma, comenzaron a identificar estrategias claves para garantizar el seguimiento y participación de los jóvenes sin exclusión. Han evaluado las capacidades necesarias para implementar ajustes razonables, lo que ha permitido adaptar y mejorar lo que ya existe. “Fue muy valioso para nosotros escuchar directamente de las personas con discapacidad sobre su vida cotidiana y sus experiencias”, añade Ariza.
Rompiendo barreras
En la Fundación Siigo, desde febrero, se está formando Paula Bautista. Tiene una discapacidad que no la restringe para vincularse y aportar desde su perfil a una empresa, pero no había tenido la oportunidad de vincularse formalmente sector laboral. Pero este año, la situación dio un giro positivo. Actualmente, Paula trabaja en una entidad financiera nacional. “Estoy rompiendo barreras porque, aunque he trabajado antes, nunca había logrado ingresar a una empresa. Es muy satisfactorio estar en un lugar donde muchos desean estar”, comenta.
Casos como estos, se esperan que se sigan replicando gracias al proceso de mejora que implementará la Fundación Siigo y los otros operadores que se capacitaron. Entre ellos: BD Guidance, BeTek, EducaMás, Protalento, Mind Hub y Agile Innova.
Sin embargo, más allá de la capacitación, el acompañamiento y el asesoramiento a las personas con discapacidad también se debe hacer un trabajo con las empresas. Hay que acompañarlas “para que conozcan las diferentes alternativas que favorezca la inclusión para personas con discapacidad, para que no tengan temor y vean las oportunidades y beneficios que hay al contratar personas con discapacidad”, concluye Salazar.
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