La pandemia nos mostró varias necesidades y las maneras cómo podemos resolverlas. Algunas de ellas tienen que ver con las barreras que hoy tenemos en la educación y con el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) para superarlas.
Sin embargo, no es claro cómo aprovechar las TIC para lograr acceso universal en la educación, reducir las diferencias en el aprendizaje y apoyar el desarrollo de los maestros y maestras, entre otros asuntos.
Pensando en ello, la Fundación Saldarriaga Concha elaboró con un grupo de expertos en diferentes áreas la publicación ‘Tecnologías para la inclusión: Guía práctica para la innovación educativa y la creación de contenidos accesibles’.
El objetivo de la fundación es ofrecer orientaciones prácticas para promover el uso y la apropiación pedagógica de las TIC en la escuela. De esa manera, se pueden fortalecer procesos de inclusión y propender por unas prácticas educativas innovadoras para todos los estudiantes.
“La guía da respuesta a la necesidad de aprovechar las tecnologías digitales para movilizar transformaciones en los modelos, las prácticas pedagógicas, los procesos de evaluación, sistemas de gestión y de comunicación, la creación de materiales y los recursos pedagógicos, entre otros”, explica Lina María Aristizábal, líder de Educación y Formación de la Fundación Saldarriaga Concha.
La premisa es que estas transformaciones permiten disminuir las barreras al acceso al conocimiento, la comunicación y la participación de toda la comunidad educativa.
“Aunque el sector educativo ha avanzado en el acceso y uso de las tecnologías, la pandemia reveló la necesidad de acelerar la adopción de tecnologías para la educación y mostró también la importancia de trabajar con los docentes en la producción de contenidos educativos accesibles y diseñados para todos los estudiantes, además de impulsar innovaciones pedagógicas”, agrega Aristizábal.
¿Qué se encuentra en la guía?
Con un diseño muy ‘amigable’, que incluye ejemplos y orientaciones, la ‘Guía práctica para la innovación educativa y la creación de contenidos accesibles’ tiene diferentes aspectos de interés para quienes quieren elaborar contenidos inclusivos con las TIC.
El primer apartado contiene orientaciones para promover la innovación educativa con uso de TIC. El segundo presenta recomendaciones para la creación de contenidos accesibles que recopila herramientas de Office, y el tercero comprende la configuración de entornos virtuales de aprendizaje. Además, señala elementos para tener en cuenta en entornos virtuales de aprendizaje y aspectos claves para la Innovación Educativa con Uso de TIC. Esta última se presenta como una ruta con momentos y acciones a través de las cuales se puede identificar si una práctica pedagógica es innovadora o no.
La estructura de la guía responde a los requerimientos que identificó la fundación a partir del trabajo que realiza en educación inclusiva con las Secretarías de Educación y con maestras y maestros de instituciones educativas en todo el país.
“Durante la pandemia, la educación y los actores del sistema tuvieron que adaptar la atención educativa muy rápidamente a entornos digitales. Y en esta coyuntura encontramos necesario ir más allá de orientaciones y ofrecer herramientas prácticas para dar respuesta a la nueva realidad de la educación”, comenta la Líder de Educación y Formación de la Fundación Saldarriaga Concha.
En ese sentido, la guía da respuestas a requerimientos fundamentales para enfrentar las brechas que deja la pandemia: el uso de las tecnologías y los ambientes virtuales de aprendizaje, el impulso a la innovación educativa y pedagógica y la garantía de accesibilidad de los materiales educativos.
Material fundamental
La Fundación Saldarriaga Concha espera que esta guía se convierta en un material fundamental en el apoyo de la transformación de la educación. Que la guía brinde herramientas prácticas que impulsen la inclusión y la equidad en la educación.
Por esa razón es de acceso libre. Además, la fundación está diseñando unas rutas de acompañamiento y formación a la comunidad educativa, en especial a los docentes a través de los programas de acompañamiento situado y de la Red de Conocimiento y Práctica Maestros por la Inclusión.