“La tecnología para mí es mis ojos”, dice Alexander Rodríguez de 43 años. Él es ciego, vive en Bogotá y trabaja en el área de facturación de una empresa de tecnología. “Si no existiera el lector de pantalla, que le permite a una persona con discapacidad usar el computador, no tendría trabajo: Si no existieran las aplicaciones como Google Maps, Lazarillo y otras, que sirven para que uno se ubique en la calle, muy difícil me podría ubicar”, agrega.
Alexander comparte algo de su cotidianidad en el documental Bogotá en Otras Visualidades, un proyecto web que recoge las narraciones de las personas con discapacidad visual que viven en Bogotá y dan cuenta de cómo perciben la ciudad.
Así como como él, 45,6 % de personas con discapacidad del país consideran que las TIC le han facilitado mucho su vida, según el documento del Departamento Nacional de Planeación Evaluación de Resultados de la Política Pública Nacional de Discapacidad (PPDIS).
Sin embargo, es claro que para poder utilizar las TIC las personas requieren de un entrenamiento, el cual consiguen de diferentes maneras. Bootcamps, escuelas y cursos son algunas de esas alternativas para las personas mayores y/o con discapacidad que, sin lugar a dudas, les permiten una inclusión social.
Bootcamp (campamento de entrenamiento)
Además de acudir a las TIC para desenvolverse en el día a día, algunas personas con discapacidad también se forman para trabajar. Ese es el caso de Virginia Velásquez Soto. Ella se capacitó en la academia Geek, a través de una convocatoria que hicieron la Fundación Saldarriaga Concha y Makaia.
La convocatoria se denominó Academia Geek Ser + Capaces, un bootcamp en desarrollo web front-end con prioridad para personas con discapacidad, al garantizarles los apoyos y ajustes razonables para su acceso, permanencia y certificación.
“El curso me ayudó mucho porque me generó una hoja de vida y después de que me gradué, como a los dos meses, me llegó la oferta laboral y estoy trabajando. Me ha ido muy bien y estoy contenta”, dice la joven.
Virginia es sorda y hace varios años es técnica en Diseño Gráfico Digital. Aunque ha estado en constante actualización, había sido difícil emplearse hasta que hizo este curso, para lo cual contó con servicio de interpretación, que la ayudó con la vinculación laboral.
Según Juan Pablo Alzate, líder de Generación de Ingresos en la Fundación Saldarriaga Concha, estos bootcamp tienen altos niveles de colocación laboral porque durante el entrenamiento simulan proyectos que los participantes desarrollarán en sus trabajos. “Contribuyen a la inclusión, crecimiento y competitividad del país al conectar personas con discapacidad y personas mayores al sector digital, a través de empleos en empresas en modalidad remota y desarrollar proyectos de manera independiente”, explica.
Frecuentemente la fundación abre convocatorias para bootcamps. El 30 de noviembre cierra la convocatoria para Desarrollador/a Junior Full-Stack/Java en Bogotá. Más información aquí.
TIC y educación
Haciendo énfasis en la población sorda, Geovani Meléndres, director del Instituto Nacional para Sordos (INSOR), explica que las TIC han jugado un papel determinante en el ejercicio del derecho de acceso a la información y al uso de herramientas tecnológicas de esta población en Colombia, pues han incidido en la promoción de entornos que responden a sus necesidades.
Por ejemplo, dice, las TIC sirven para la educación de las personas sordas. “Se puede acceder a contenidos educativos y clases virtuales a través de herramientas tecnológicas como plataformas educativas. Aduciendo al caso del INSOR Educativo, El Profe en tu Casa (Señal Colombia) y otras que indirectamente se ven influenciadas por este tipo de formación, podemos afirmar que son bastante valiosas estas formas de acceder a la información”.
Meléndres destaca que en el sector educación el desarrollo del Examen Saber 11 en plataformas digitales ha permitido que los estudiantes sordos presenten sus pruebas utilizando su primera lengua. Y, en el caso del sector de las comunicaciones, el servicio público del Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (MinTIC) Centro de relevo es una muestra de cómo la tecnología impacta de manera positiva el bienestar de los ciudadanos. Lo que al inicio era una comunicación telefónica, en la actualidad tiene una APP como parte de las herramientas que ofrece.
Las personas mayores y las TIC
La Academia Geek Ser + Capaces también tuvo espacio para las personas mayores. José Félix Céspedes de 55 años de edad pasó de ser técnico electricista, con 25 años de experiencia, a desarrollador Front-end junior.
Por una situación de salud de su mamá decidió dejar su carrera y enfocarse en ella. Pasado el tiempo, y con la recuperación de su mamá, empezó a buscar oportunidades por internet. Encontró un curso de desarrollo web que ofrecía el MinTIC, después de cursarlo pasó a formarse con la academia Geek.
“Podemos cambiar, no importa la edad, siempre hay opción. Me apasionó la programación y quiero fortalecerme más en conocimiento y experiencia, por eso debo ser autodidacta y seguir investigando. Agradezco mucho por este bootcamp, hoy hice mi primer pitch. Tenemos que ser extensivos en la educación para tener etapa productiva más larga”, dice Céspedes.
Me cuido Activo
Me Cuido Activo permite fortalecer capacidades en personas mayores, promoviendo un proceso de envejecimiento de mayor calidad. Se compone de siete módulos, el siete es Escuela TIC.
“Con relación al Módulo Escuela TIC tengo una de las mejores experiencias, ya que pude comprender todos los beneficios que se obtienen siendo un ciudadano digital. También me amplió el conocimiento en el uso de la tecnología para expandir mis relaciones familiares y de amigos, así como la comodidad de realizar muchas actividades cotidianas a través del internet”, comenta Rocío Cabeza de 53 años de edad (Cartagena).
Este curso hace parte de la estrategia Me Cuido Activo, desarrollada por Fundación Saldarriaga Concha, Fundación Luker, Universidad de Caldas, Universidad Autónoma de Manizales, Universidad Católica de Manizales, Ceder, Confa, Finanfuturo y Alcaldía de Manizales.
“Incentiva la autonomía, independencia y participación de las personas mayores en la ejecución de las actividades de su vida diaria”, expresa Lina María González, psiquiatra y líder de Salud y Bienestar en la Fundación Saldarriaga Concha.
Escuela Virtual Historias en Yo Mayor
Esta escuela surgió durante el confinamiento por Covid 19 con el slogan “Tu creatividad no entra en cuarentena”. Con anterioridad, en 2011, las fundaciones Saldarriaga Concha y Fahrenheit 451 iniciaron el Concurso de Cuento y Narración Oral Historias en Yo Mayor, con el fin de visibilizar las historias y los saberes de las personas mayores en el país, pero en cuarentena pasó a tener el componente virtual.
Este año la escuela está en su tercera versión y la realizan estas dos fundaciones en alianza con El Tiempo. Su objetivo es enseñar a personas mayores de 55 años a construir relatos orales o escritos.
En cuanto a lo digital, ha sido un aprendizaje tanto para la escuela como para sus participantes. La escuela cuenta con un kit compuesto por diferentes herramientas pedagógicas virtuales (en texto, video y audio).
“Los participantes tienen toda la información en la página web, también se envía información por correo electrónico y WhatsApp. Han aprendido a compartir por correo y Whatsapp sus cuentos, a grabarse con el celular, a contar las historias en audio. Tenemos personas que dicen: a mí no me gusta escribir, entonces han aprendido a identificar la grabadora de voz en su celular para recopilar esas historias. Esos han sido algunos casos, a veces se graban en video para enviar esos relatos y seguir compartiendo”, expone Mauricio Díaz, coordinador del proyecto.
Más información de la escuela aquí
Cómo aumentar la inclusión digital
El director del INSOR señala algunas situaciones que limitan la inclusión de las personas con discapacidad:
- En nuestro país aún persisten dificultades para estar conectado a internet, sobre todo en las zonas rurales. Allí es donde se presentan barreras para acceder de manera fluida al uso de plataformas.
- Los espacios públicos para el acceso a Internet como los puntos VIVE Digital de MinTIC han tenido gran acogida; sin embargo, en los cambios de Gobierno se dan variaciones en su funcionamiento que afectan el beneficio que reciben los ciudadanos.
- Faltan programas de formación para poblaciones con discapacidad, en específico para las comunidades de sordos. Se requieren programas que cumplan con los mínimos elementos accesibles (equipos actualizados, conectividad, profesores sordos capacitados, etc.) que les permitan actualizarse y entrenarse para manejar el entorno virtual.
- El desarrollo tecnológico no garantiza su utilización; por lo tanto, se hace necesario implementar una serie de capacitaciones que muestren el sinfín de posibilidades en la exigibilidad de los derechos que les asisten a las poblaciones vulnerables.